




Santa Isabel de Hungría es símbolo de caridad, humildad y entrega al prójimo. Su vida fue ejemplo de compasión y fe inquebrantable, recordándonos que la verdadera nobleza nace del corazón que ama sin medida. Representa la alegría del servicio desinteresado y la luz que brota de la generosidad sincera.
Su imagen inspira ternura y esperanza, invitando a vivir con sencillez, amor y confianza en Dios, incluso en los momentos más cotidianos. Ideal para quienes buscan un símbolo de bondad, protección y devoción verdadera.
Festividad: 17 de noviembre
Todas las medallas clásicas del Santoral se entregan en el plazo de 10 días laborables.
Islas de 3 a 5 y resto de países consultar.
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